En octubre del año 2011 se demolió una de las casas de altos más antiguas de Concepción. Una obra que precisamente cumplía 100 años y era un fiel representante de esa tradicional tipología que combinaba comercio con vivienda en altas e imponentes construcciones. De fachada y distribución simétrica, esta gran propiedad comprendía dos locales y dos viviendas unidas en su interior por un patio. Históricamente uno de los amplios locales perteneció a la Suelería Las Tres Pascualas, firma que dejó este edificio con posterioridad al terremoto del 2010. El nivel superior fue ocupado por décadas por la Residencial Central, la cual ocupó gran parte de las habitaciones, siendo muchas de ellas decoradas con cielos pintados sobre tela y con molduras de yeso y madera ricamente diseñadas y talladas. Una construcción estructurada con rieles y compuesta por albañilería que sufrió daños producto del terremoto del 2010 pero que no ameritaba la demolición. Lamentablemente nunca se ingresó como Inmueble de Conservación Histórica y tampoco se pensó si quiera una transformación que respetase su historia y presencia en el paisaje urbano del centro. Al final se demolió dejando sólo un fragmento de la fachada para servir de acceso a la “Galería Rengo”, un centro comercial en el que no hubo ninguna búsqueda o exploración arquitectónica.
Fotografías de Luis Darmendrail Salvo para Historia Arquitectónica de Concepción. Fotografía de cabecera del libro «Municipios de Concepción» de 1946, cortesía Alexander Bustos C.